Desde el recibidor principal el consumidor podrá ver toda la variedad de bebidas, así como el Salón Privé, un área exclusiva con capacidad de hasta 22 personas y accesible solo por reservación, que está decorada con detalles antiguos que recrean el Colmado Fernández en el Viejo San Juan, donde comenzó la empresa familiar en el año 1888. En la planta baja se encuentra un salón de adiestramiento para catas y seminarios, que dispone de cocina y una capacidad de hasta 50 personas, así como las 78 cavas privadas climatizadas para alquiler con capacidad para entre 100 a mil botellas. En el tercer piso de la estructura se sitúa una terraza abierta que estará totalmente operativa más adelante.

El Almacén del Vino fue un concepto que cobró forma en un almacén de congelados que la empresa B. Fernandez tenía para las líneas de productos de panadería, y satisfizo la necesidad de crear un espacio dedicado para la cartera de vinos que la empresa estaba conformando. Para aquel entonces, B. Fernández contaba con más de doscientas etiquetas dado a que un lustro antes había adquirido la distribución de vinos de otra empresa, incursionando en la distribución de este producto. Para 1994, B. Fernández amplió su oferta de vinos y comenzó con la distribución de bodegas reconocidas y de prestigio de Chile, a las que pronto se sumaron otras de España y Francia, hasta construir un sólido porfolio.